EL GUSANO EN EL MEZCAL
adoos4itit La perfecta foto estival de la mujer sobre un fondo paradisíaco, era sobre todo una apariencia. En realidad, detrás de la sonrisa suave asomaba una profunda e insolente tristeza que la había sorprendido justo allí. Le sucedió en el momento menos pensado; de pronto se sintió fuera de lugar, sola en medio de tanta gente con la que hasta hacía minutos conversaba y reía. Estaba vestida de blanco, tal como lo dictaba el Dress Code para la ocasión, en medio de la esperada y alegre fiesta de casamiento de sus amigos, en la tierra de los Mariachis. Amador y Luna celebraron una boda cinematográfica en unas caletas agrestes y tropicales a una hora de barco de Puerto Esmeralda. En las caletas ni siquiera había luz eléctrica, por lo cual, al ir cayendo el día, la fiesta se iluminó totalmente con velas. Se cantó, se bailó y se bebieron mucha cerveza, tequila y mezcal hasta la hora de tomar nuevamente el barco de regreso. Al otro día, se subió a un bu